Desde mi
personal punto de vista…
Xico, Ver., a 28 de Diciembre del 2014. Soy J. Genaro Moreno Martínez
La cuestión... son los aguinaldos...
Estamos finalizando un año más, un
lapso más de tiempo que se acumula a nuestro haber. La alegría de las fiestas
de diciembre empezó desde el pasado día 12. Los adeptos a los asuntos de la
religiosidad dieron ese paso con festejos de la Virgen de Guadalupe.
Pasado todo eso… sigue la alegría pensando
en lo que viene… ¡EL AGUINALDO! siendo que el día 20 era el último día, el día
definitivo para recibirlo. –Claro- para aquellos apatronados, para los que
tienen la suerte de contar con un empleo fijo y también aquellos que no son de
planta pero si el patrón es benévolo y se ajusta a las leyes que nos rigen… en
su parte proporcional para aquellos que lograron el mínimo legal para hacerse
acreedores al beneficio del aguinaldo.
Lamentable que en algunos casos no
fuera así, ¡con que ilusión el trabajador espera esa codiciada remuneración! Le
dice a su familia… ahora que llegue el aguinaldo te compraré o les compraré,
iremos a… o pagaremos lo que adeudamos… etc. Tantas frases como esta suenan en
los humildes hogares que todavía sueñan con el codiciado ¡AGUINALDO!
-PERO- ¿cuál es la sorpresa? cuando
vemos a los empleados dar vueltas, con eso de la tecnología y con los pagos en línea…
entiéndase vía tarjetas de débito o deposito salarial. Vueltas y más vueltas al
cajero, y nada que aparezca el codiciado AGUINALDO, -pero- ya es 24 de
diciembre… la cena se aproxima y el satisfactor dinero no llega. Es ahí donde
las ilusiones se viene abajo, no podré pagar mis deudas… no podré comprarle o
comprarles a la familia lo que les prometí, dice en sus adentros el humilde
trabajador soñador, un pasaje estrictamente parecido por no decir similar al
famoso Jíbarito, aquel que “sale lleno de contento para la ciudad, piensa
remediar la situación…”
¿Y los patrones? Sí esos señores que
con suficientes recursos en mano, salen a los mejores lugares de autoservicio y
se repletan de cosas para festejar la navidad, para la cena.
¿Acaso no les remorderá la conciencia
al sentarse a la mesa para disfrutar sus potajes, cuando sus empleados no tienen
que llevar a sus desapretadas mesas de sus hogares?
Alguien que se encontraba junto a mí,
en este preciso momento de tundir a golpes el viejo teclado de mi computadora
me dice: ¡esto me suena a política! La
contestación obligada a su cuestionamiento fue la siguiente; mira, esto se da
por doquier, sin embargo, los políticos pudieran ser, ha con sus contadas excepciones los de menores sentimientos hacia su gente, hacia aquellos que los
posicionaron, hacia aquellos que se fregaron tanto para que ahora, esos, los políticos gocen de grandes canonjías
como pudieran ser… salarios elevados, compensaciones, gastos de representación,
gasolina, casetas, comidas, etc. Y todo eso que les venga en gana en gastar, al
fin y al cabo que todo va aplicado en la cuenta pública, al erario público que
todos pagamos de una u otra forma.
Oye… ¡¡¡y los trabajadores!!! A esos
que se los cargue el pingo, para que son tontos y se dejan que se los cargue
Morfeo y los duerma con su discurso, “que toda va a cambiar, que se combatirá
el hambre, la pobreza y todo aquello que se le parezca.
Tal parece que pasada una
administración, todo va a cambiar… así se sueña, así sueña el pueblo… que al
finalizar esa administración al igual que otras pasadas, las cosas siguen de
mal en peor. –Bueno- hay personas que hasta aplauden actos benévolos
de otros… de esos otros que llegan a las comunidades a ofrecer ayuda, (no sin
antes está sea condicionada subliminalmente) y dicen FELICIDADES por traer a nuestro municipio
beneficios para nuestra gente. No se dan cuenta que los que debieran ayudar a
su gente son ellos… SÍ los políticos en función, esos que se comprometieron en
campaña … AYUDAR.
¡OYE! pero los aguinaldos… vuelve a
cuestionar mi acompañante, ese que siempre está junto a mí, en todo momento, al igual cuando me lleno de rabia al ver la incomprensión de la gente, de esa gente que al
parecer se sienten aludidos por mis observaciones y para colmo de males, dicen;
nos tiene envidia, no nos comprende, lo que escribe no es de él, no sabe, está loco… -tal
vez- tengan razón… -pero- de lo que digo es verdad, sin duda… ¡y me
preguntaran,! porqué lo digo afirmativamente, precisamente ahí está el meollo
del asunto… porque cuando se dice la verdad no faltará uno que otro ciudadano o
funcionarillo que se encabrone y gire expresiones con la intención de minimizar
los cuestionamientos que se les hacen.
Para ello, le apuesto al intelecto de
los lectores, ellos si me entienden, se dan cuenta y para ello tengo la opinión de mis líneas.
Sí, no te me incomodes tú también,
le digo a mi acompañante fiel, al único que me comprende y me ayuda, tanto es
así, que siempre está conmigo…
Sí lo de los aguinaldos: ese es el rumor en diferentes lugares del distrito, que también acá en XICO, VER., se
dice lo mismo… -que algunos empleados municipales ya lo cobraron. Sí, deben ser
los sindicalizados, ¡los de confianza que se esperen!…
Esperamos que cuando estas líneas se maquilan,
por gracia de Dios, ya hayan recibido sus dineros los empleados de mi pueblo,
los soñadores, los que esperan que en verdad se actué con justicia ante ellos,
esos que se lo merecen, los recolectores de basura, los electricistas, los
barrenderos al interior del palacio municipal, los adscritos al DIF municipal, los secretarios, los policías, etc. Porque contamos
con versiones que aún les adeudaban
tanto parte de sueldo, aguinaldo, ni se diga.
Insistiendo sobre el tema, esperamos
que en este momento al salir a la calle, me encuentre alguien y me diga: ¡Ya por fin
nos pagaron los sueldos caídos y el aguinaldo!
Porque de no ser así, le preguntamos
por este conducto a los funcionarios públicos: ¿se sienten cómodos al sentarse
a la mesa de sus hogares y disfrutar las grandezas que les da el cargo, a
sabiendas que no han cumplido con sus
trabajadores ?
¡Pero bueno! si esto no
fuera cierto, deséchalo, porque de lo contrario… ¡¡¡aquí está el saco, que se lo ponga a quien le venga!!!
P.D. aun se recuerdan
las palabras del dos veces alcalde J.M.G.G. (q.e.p.d.) “compañeros: les informo que si alguno de
ustedes quiere su aguinaldo… a partir de Mayo ya estará a su disposición y
quien lo quiera por adelantado; también prestamos,
nomás acuérdense que se deben pagar según lo acuerden” palabras más, `palabras menos, pero así sonaba en
aquellos ayeres en tiempos del bien recordado JUAN MANUEL.
Referencia: El
artículo 87 de la Ley Federal de Trabajo (LFT), contempla que el pago del
aguinaldo a los trabajadores es una obligación ineludible para las empresas y
patrones mexicanos. Y ya que es un derecho que en ningún caso puede ser omitido
por el patrón sea grande o pequeño, todos los empleados deben recibirlo,
incluso los de confianza o aquellos que tienen menos de un año de servicio
independientemente de si están o no laborando en la empresa en la fecha de
liquidación del aguinaldo.
En el caso de tener menos de un año, deberá ser cubierta la parte
proporcional del aguinaldo, conforme al tiempo que el empleado trabajó en la
empresa o negocio, cualquier periodo que éste haya sido. Si saliste de la
empresa, negocio o patrón individual y no se te pagó la proporción que te
correspondía por este concepto, puedes reclamarlo en el plazo de un año después
de tu salida (sin importar la causa que generó la terminación de la relación
laboral).
El aguinaldo para nada es un regalo, es un derecho y fruto de un año de
trabajo o fracción, por lo que el empleado debe exigir su pago, y de acuerdo
con el periodo establecido por la ley los trabajadores deberán recibirlo a más
tardar el 20 de diciembre
ARTÍCULO 78.- Estado, Los
servidores públicos tendrán derecho a un aguinaldo anual, equivalente a 40 días
de sueldo base, cuando menos, sin deducción alguna, y estará comprendido en el
presupuesto de egresos correspondiente.
Dicho aguinaldo deberá pagarse en dos entregas, la primera de ellas
previo al primer período vacacional y la segunda a más tardar el día 15 de
diciembre.
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